Información general

Es un templo Católico, restos del antiguo convento de la Concepción Real de las monjas de la Orden de Calatrava, situada en una de las vías más importantes de la Capital, calle Alcalá a escasa distancia de la Puerta del Sol. La historia del convento está inseparablemente unida a la Orden Militar de Calatrava, fundada en el siglo XII, para defender las posesiones cristianas de la península de los ataques de los musulmanes en el contexto de la reconquista.

Las Órdenes Militares a pesar de su carácter guerrero y masculino, pronto crearon la rama femenina de carácter monacal, con el fin de recoger a las esposas e hijas de los Caballeros que partían a la guerra. Así surgieron las Religiosas Comendadoras de Calatrava, como rama femenina de la misma Orden.

Lo mismo sucede con la Orden Militar de Santiago, que también tendrán su rama femenina como Comendadoras de Santiago. Convirtiéndose dichos conventos en prestigiosos centros educativos para los hijos de los nobles caballeros, de quienes siempre recibieron bienes y protección de todo género.

Estas religiosas de Calatrava en Madrid se habían ubicado inicialmente en Almonacid de Zorita (Guadalajara) localidad muy ligada a la Orden de Calatrava.

En 1623 y por mandato de Felipe IV se trasladan a Madrid. Convento e Iglesia se construyen en esos años, llegando a ser uno de los conventos más populares y conocidos de Madrid. Su esplendor dura dos siglos.

Curiosamente se libraron de la Desamortizaron de Mendizábal, pero durante el Sexenio Democrático (1868-1874) se decide derribar convento e Iglesia, sin olvidar que, con la Desamortización de 1836, la mayor parte de los conventos habían quedado vacíos.

La realidad es que en 1870 se logró salvar la Iglesia, gracias a las presiones e intervención personal de Manuel Silvela, (Concejal, Senador Vitalicio, Embajador de España en Paris) y de la duquesa de Prim (Viuda del General Prim), cómo también de algún militar de alta graduación que pertenecientes a la Orden de Calatrava, lograron del Gobierno del 1870 que la Iglesia no fuera derribada como se pretendía, siendo una de las Iglesias barrocas más destacadas del siglo XVII.

El convento fue demolido en su totalidad dos años después en 1872. La desaparición del convento adyacente deja la iglesia embutida en un cúmulo de edificios que rompen la armonía estética del exterior de la Iglesia. Posteriormente la Iglesia se convierte en Parroquia y a pesar de los avatares de la Guerra Civil, esta no sufrió daños significativos, quedando su interior intacto.

La falta de conservación y mantenimiento después de la guerra sufre un grave deterioro en las últimas décadas de siglo XX a pesar de ser un monumento histórico, reconocido como tal por la Comunidad Autónomo de Madrid en 1995, con el calificativo de Bien de Interés Cultural.

Al inicio de los años 2.000, mediante la firma de un convenio de restauración entre EMVS, Ayuntamiento de Madrid, Comunidad de Madrid y Caja Madrid, se consigue acometer una importante tarea de restauración, tanto del exterior como del interior de la Iglesia, consistente: en la reparación de la cubierta y la cúpula, la recuperación de la fachada con su revoco original y la restauración de su interior.

La iglesia, como edificio, responde a una arquitectura conventual del barroco español, que se caracteriza por su sencillez volumétrica y decorativa. El Proyecto es obra de Fray Lorenzo de San Nicolas, uno de los arquitectos más destacado del Barroco cortesano del siglo XVII. La Iglesia es de planta rectangular. Nave con capillas laterales y con una amplia bóveda, octogonal en el exterior y circular en el interior y con linterna, sujeta en el interior por cuatro modillones en el anillo. El magnífico retablo es obra de Churriguera. La fachada exterior a la calle Alcalá fue reformada en estilo neorenacentista, según proyecto de Juan de Madrazo y Kuntz, con un revoco rojizo, repitiendo en esgrafiado el motivo de la Cruz de la orden de Calatrava.

Información sobre accesibilidad

Cómo la mayoría de las iglesias Barrocas del siglo XVII, la accesibilidad para personas con silla de ruedas no es posible por qué la entrada principal una vez superar la cancela metálica para acceder a la puerta de la Iglesia, le precede una escalera de piedra con cuatro peldaños.

Acceso en transporte público

Metro con ascensor: Sol L1, L2 y L3. Gran Vía línea L1 y L5. Sevilla L2.

Autobuses: 14, 150, 46, 65, 74, 9, E1..

Cercanías: Sol C10, C2, C3, C3A, C4A, C8

Aparcamiento: Plaza del Carmen, Calle Sevilla y Plaza Pedro Zerolo.

HORARIO: Lunes a Sábados: de 8:00 a 13:00 y de 18:00 a 20:00 horas. Domingos y festivos: de 11:30 a 13:00 horas.