El espacio que ocupa el Teatro EDP Gran Vía, nos remonta al teatro que abrió sus puertas en 1944, aunque anteriormente en 1913 ya había funcionado otro teatro en un antiguo solar del mercado de los Mostenses, que tres años después, paso a ser cine y con esta actividad permaneció hasta que el edificio original fue derribado para la construcción de la calle Gran Vía.
En 1944, un nuevo proyecto de German Álvarez de Sotomayor abrió de nuevo sus puertas a este espacio, dedicado en principio al séptimo arte, bajo la denominación de Cine Gran Vía, con un paréntesis de tres años para ser un espacio teatral entre los años 1947 y 1950, en lo que se consideró como el embrión de la actividad teatral en la zona.
Tras más de medio siglo como salón de estrenos cinematográficos, fue reconvertido en 2004 como un espacio para las artes escénicas, primero con el nombre de teatro Compac Gran Vía de Madrid. En 2017 aparecía con el nombre de Teatro de la Luz Phillip Gran Vía hasta que en noviembre de 2019 por razones de patrocinio paso a denominarse Teatro EDP Gran Vía.
En la actualidad el Teatro EDP Gran Vía forma parte de la oferta del grupo Smedia, que ofrece entre sus espectáculos: Teatro musical, conciertos de música de diversos géneros, danza, ballet, flamenco y espectáculos de humor, programado desde un prisma internacional y cosmopolita.
La entrada del Teatro EDP Gran Vía es difícilmente accesible por la puerta principal situada en la calle Gran Vía. La parte central de la entrada la ocupa una amplia escalera con varios peldaños, en la parta derecha de esta, hay un recorte en el que se ha habilitado una pequeña rampa muy estrecha y con una pendiente peligrosa para el paso en silla de ruedas, lo que supone un peligro y la hace inadecuada si no se va acompañado.
Desde el hall se accede al patio de butacas, que es el único espacio accesible para que puedan ver la función personas con movilidad reducida (PMR) en un itinerario accesible sin barreras ni desniveles y hay espacios reservados para personas con movilidad reducida, de lo que su página web también informa. Ninguno de los palcos es accesible.
En el hall, también se encuentran los aseos, que están adaptados para personas con problemas de movilidad, y al que se puede entrar en silla de ruedas.
No disponen de medidas para facilitar la accesibilidad a personas con problemas visuales ni auditivos.
Metro con ascensor: Callao L3 y L5, Gran Vía L1 y L5.
Metro sin ascensor: Noviciado L2.
Autobuses: 001, 1, 146, 2, 46, 74, 3, 148, 147, 75 .
Cercanías: Sol-Gran Vía
Aparcamiento accesible: Plaza Santa María Soledad Torres Acosta, Plaza de España.